Favignana, la mayor de las islas Égadas frente a Sicilia, emerge como un destino que combina historia, naturaleza y una calma casi mítica. Con menos de cinco mil habitantes, su paisaje de rocas volcánicas, aguas turquesas y vestigios de antiquísimas prácticas de pesca narra siglos de vida junto al mar
..
Entre sus relatos más emblemáticos, se destaca la tonnara, o fábrica de atún, que alcanzó fama en el siglo XIX como una de las más grandes del Mediterráneo Aunque esa actividad decae, hoy su planta iconográfica se reconvirtió en museo, evocando rituales de pesca y tradiciones marítimas profundamente enraizadas.
…


…
El mayor atractivo de Favignana está en sus calas: Cala Rossa, de aguas turquesas y acantilados de piedra roja; Bue Marino, una antigua cantera hoy perfecta para nadar; y Cala Azzurra, una playa más accesible con arena clara y oleaje suave. Todo se vive en bicicleta o en motorino, entre senderos tranquilos y ese aire despreocupado que invita a desacelerar el ritmo.
…


…
Favignana no es para correrla: es para descubrirla con calma, sintiendo el viento salado y la luz dorada sobre el mar. Aquí lo esencial se guarda en la sencillez —una comida frente al puerto, un chapuzón al atardecer—, y lo auténtico se revela sin artificios. Más que un destino, es un encuentro con la Sicilia visceral.