Vengo seguido a Mendoza, saben que es una provincia que me encanta por su onda, su fuerza emprendedora, el desarrollo que le dieron a la industria del vino y porque tengo muchos amigos acá. Casa Naoki es divina, vine con amigos de mis amigos, una visita especial❤️ y es mi segunda vez acá.
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Casa Naoki es la casa de huéspedes de Casarena Bodega y Viñedos, en Luján de Cuyo, Mendoza. La finca donde está la Casa, es propiedad de Dartley Family Wines, un proyecto queincluye varias unidades de negocios dedicadas a la industria del vino y la hospitalidad.
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¿Cómo funciona? Es una casa super exclusiva, moderna y estilo minimalista que podés alquilar por el día o varios días, como si fuera tu casa privada pero con servicios de hotel, obvio, de lujo. Tiene una vista 180° de la cordillera y la finca que es de locos y queda en Agrelo -Luján de Cuyo- que es la zona donde están los nuevos desarrollos hoteleros que no para de crecer y a 20 minutos de Mendoza ciudad.
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Tiene 4 habitaciones, todas en suite, entran creo que hasta 10 personas, mi lugar favorito obvio la piscina infinita con esta vista y al sunset, o sea. Magia.
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El wifi vuela aunque obvio, hay que moderarse con el vino porque tiene una cava privada y te ofrecen degustación de vinos de su bodega las veces que quieras. Ser nómade digital en Mendoza se pone dificil jajaja 🤣
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Tiene servicio de hotel, te hacen todo, empezando por el desayuno, y durante el día hay chef que te resuelve todo adentro (hay hasta asador con horno a leña) y si querés restorán, está Savia con menú a la carta o la experiencia de menú fijo de 7 pasos maridando con vinos de su bodega.
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Las villas privadas y alejadas de los centros urbanos son tendencia mundial, el movimiento sellama “private housing” pero acá en Mendoza, otra escala, o sea, combinan atención y servicios de un hotel 5 estrellas y omg, el entorno que tenemos. Qué privilegiada sos Mendoza!
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Saben que viajo mucho y me está pasando que últimamente … hogar ya no es un lugar, ni una casa. Encuentro una casa-hogar en cada aspecto de mi vida que me hace bien, en un momento, en un recuerdo que valió la pena. Y Casa Naoki fue eso.